lunes, 2 de diciembre de 2013

El arte nunca se queda sin admiración

Poco después de cerrar los ojos empecé a ver aquella casa en ruinas, la casa donde supuestamente me tocaría pasar la noche. Mi tarea consistía en sacar todos los escombros de allí, hacer una montaña de ellos y conseguir hacer una obra de arte de todo aquello.
En acabar, me alejé de mi supuesta obra para observarla mejor y me quedé con la boca abierta solo de ver que cada trocito de cemento y metal estaban colocados de tal manera que ni una gota de lluvia resbalando por el cristal de la ventanilla de un coche era tan espléndida como aquello.
Todo cambió al entender que si había hecho tal escultura, solo era por miedo a quedarme solo, el arte nunca abandona, nunca se queda sin admiración.
Bueno o malo, siempre será él, el tuyo.

2 comentarios:

  1. m'ha agradat moltssim! li he llegit a la meva mare i tambe li ha encantat, segueix aixi arnau tens molt potencial, encara que a vegades no t'ho arribis a creure! :)

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  2. M'ha encantat, sol arribo a dir això davant d'aquesta bellesa enserio. Destaco "gota de lluvia resbalando por el cristal de la ventanilla de un coche", és impressionant.

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